Esto resalta la importancia de crear una red de equipos interconectados que puedan adaptarse e innovar rápidamente. Este enfoque reconoce que es posible que los equipos individuales no puedan resolver problemas complejos de forma independiente.
Se fomenta una mentalidad de crecimiento, en la que los individuos y los líderes ven los desafíos y fracasos como oportunidades de aprendizaje y crecimiento. Esta mentalidad es esencial en un mundo VUCA.
Se destaca la creación de una cultura de coaching dentro de una organización para mejorar el desempeño y mejorar la experiencia de los empleados. Se espera que los líderes y gerentes desempeñen un papel fundamental en la promoción del coaching para ayudar a los miembros del equipo a alcanzar su potencial.
En un mundo globalizado donde interactúan personas de diversos orígenes, la competencia transcultural se considera esencial. Esto implica reconocer, respetar, reconciliar y darse cuenta de las diferencias y dilemas culturales.